Descripción: El disco más psicodelico de ellos y para muchos el disco que pudo ser el antagonista de "Sgt Pepper's Lonely Hearts Club Band" Octavo disco y punto álgido en su carrera. Aun con el infravalorado Brian Jones. Una rareza en su mejor sonido.
Decameron es una banda que se formó en la gélida Bahía
Blanca, allá por el año 1993 y está, ya
hace años, asentada en la capital porteña.
Lo que tenemos aquí es el segundo “maldito” disco, un disco
doppelganger que, mientras por un lado, se gestaba, por el otro colmó la
paciencia y la banda se separó. Luego de varios años, se volvieron a juntar y tardaron
casi diez años en terminarlo. La esperavalió y lograron un sonido mucho más ajustado y pulido.
Los vaivenes del tiempo los hicieron madurar hasta hacerlos sonar y animarse a apostar a un
sonido cada vez más propio. Su género es punk rock, más melódico, más técnico,
más acelerado, más agresivo.
14 canciones sin freno, ni tapujos.
Si creen que exagero o miento, pruébenlo Ud. mismos
De Loveless hay mucho que contar, pero todo lo que se pueda
decir es una nimiedad porque lo que conviene es sentarse a escuchar y sentir este
disco.
Con este álbum se da el fenómeno raro, y no tan común, en el cual a mucha gente de diferentes estilos (darks,
emos, alternas, brit poperos, algunos punks y ni hablar de los ahora llamados
Indies ) les fascina esta obra maestra.
Mi amigo Paul Micheals (Pablito) tenía una revista española
del 91 que tenía el review de “Loveless” y decía “…las guitarras suenan como ballenas copulando”.
Sería muy simplista decir que es un
disco melancólico, a pesar de tener canciones muy distorsionadas y temas más
arriba. Es un álbum muy subjetivo, con cada escucha se nos agudizan las
sensaciones dependiendo del humor que tengamos.
Se dice que Kevin Shields (cerebro de la banda) buscó la perfección
con esta obra, yo creo que lo logró, porque nunca más volvió a grabar un disco
con los Valentine y pareciese que todo su potencial quedó plasmado en estas insuperables
11 canciones.
Octavo álbum de Sonic Youth que llega en pleno auge de la música
alternativa, en la cual todas las bandas
que se habían influenciado por Sonic Youth la estaban pegando, y donde los dueños
de las compañías grabadoras contrataban a cualquier banda que pudieran ser los nuevos
Nirvana.
Para este disco fue contratado como productor musical Butch
Vig, quien fue (por si alguno no lo sabe o aun lo duda) el responsable de hacer estallar
a Nirvana en el plano sonoro y comercial. Contrario a lo que se esperaba, los Sonic
hicieron un disco áspero, “sucio” como lo indica el titulo, canciones más directas cargadas de agresión.
De todas formas, el disco tuvo muy buena aceptación, tuvo
cuatro cortes de difusión y vendió muy bien. Ganaron merecimiento y consagración,
quedaron en una posición algo así como los padrinos de la movida alternativa,
under , etc. El testimonio se puede ver en el video “The year Punk Broke”
tocando junto a Nirvana, Dinosaur Jr,etc.
Volviendo al disco, casi una hora de pura distorsión y rabia
a dos voces.
Hoy no hay certezas si los Sonic Youth están separados o si seguirán
tocando. Si elegimos la primera opción, tenemos que mirar a la banda retrospectivamente y este disco es un punto de
inflexión en su carrera para empezar a hablar. Si siguieran tocando, cualquier
disco que hagan tendrá como punto de partida “Daydream Nation” o habrá
muchas reminiscencias.
La cuestión es simple, con este disco de 70 minutos rompieron
todas las barreras sonoras habidas y por haber. ¿Géneros? Puff….noise rock, punk,
indie, experimental, drone, metal, ?, etc.
Su mejor obra, y si no lo es, es
porque los otros discos están ahí cerquita. Pero claramente sí es su disco más representativo,
el que todos deberían escuchar y dejarse flagelar los oidos.
En este disco debut ya se dejaban entrever los sonidos que terminarían
depurándose en su segundo y mejor disco “Loveless”.
El disco ya se había adelantado varios años; sonaban
distorsionados y melancólicos. Mientras el mundo musical seguía experimentando con
sintetizadores, baterías electrónicas y usaban laca para peinarse, estos pibes
nunca siguieron ninguna moda ( y si hubo moda, con el género llamado “Shoegaze”
vino después de ellos) e hicieron su
propio camino. Capas sonoras con
guitarras saturadísimas, voces que parecían sirenas ancladas en un mar revuelto
de distorsión y melodías. 25 años después sigue sonando moderno.
"Barking" es el último trabajo de la banda inglesa que revolucionó
la música electrónica en los 90s. Su hit "Born Slippy" los hizo populares. Fue el corte de difusión de "Trainspotting" y en Argentina sonó a mansalva en todos lados gracias a la publicidad de la cerveza aguachenta Q.
9 temas muy diferentes entre sí, en un plan bastante tranquilo y con muchas melodías.
Un disco íntimo, pero no menos interesante. No es casualidad que hayan sido elegidos para musicalizar las Olimpiadas de Londres 2012.